La muerte de un ser querido es uno de los momentos más difíciles que deberá atravesar cualquier persona. Sin embargo, cuando hablamos de los casos de suicidio los interrogantes que surgen son mayores. Cuando conocemos a una persona y decidimos vivir con ella el resto de nuestra vida no imaginamos nunca que nuestro o nuestra compañera/o de camino decidirá algún día quitarse la vida.La soledad y la culpa se vuelven en compañeras inevitables durante el primer tiempo y su ausencia repentina deja inconclusas diversas preguntas: ¿por qué a mi?, ¿por qué ahora?, ¿qué hice mal?

Nadie tiene respuestas a estas preguntas y tampoco hará bien que tú te las realices todo el tiempo. Si estás atravesando por esta situación es importante que sepas que:

– Debes cuidarte física y mentalmente. Para ello debes darte tiempo y de a poco aprender a convivir con este dolor. Es normal que al principio sientas que no vas a poder pero verás con el tiempo que este sentimiento de desborde y desorientación irán disminuyendo.

– Es importante que no te aísles y que continúes con tu rutina de trabajo aunque siempre manteniendo un tiempo para el reposo y la reflexión.

– Tu familia y tus amigos serán fundamentales durante este proceso de duelo. Es importante que hables con ellos y les cuentes cómo te sientes así ellos pueden ayudarte en todo lo que les sea posible.

– Expresa tus sentimientos, dialoga sobre él o ella con tus hijos cuando así lo necesiten hacer ellos o vos. Llora cuando así lo sientas; es el mejor desahogo para estos momentos de tanto dolor.

– Cuando estés pensando en lo que podrías haber hecho para haber evitado esta situación, quiérete y no seas crítica contigo mismo piensa ¿de verdad podrías haber evitado que él tomara esta decisión? Estas preguntas sin respuesta clara no te ayudarán para avanzar en tu proceso de duelo.

– Cuando lo consideres necesario, pide ayuda profesional para que te acompañe y te ayude a elaborar el duelo de la manera más saludable.

– Si bien nada será igual luego de la muerte de ese ser querido, permítete volver a vivir. Deja de lado esos sentimientos de culpa y piensa en cómo puedes reorientar el sentido de tu vida luego de esta muerte.

 

Esperamos que estos consejos que sean de utilidad para ti.